Muchos de nosotros sentimos que estamos llamados a algo que da sentido a nuestra vida. De estos llamamientos, la servidumbre es uno de los más nobles. En la red Breakthrough, donde las personas y la comunidad son pilares organizacionales, hay pocos que exhiban el corazón de un servidor como Rosamund Benjamin., o Sra. Rozy como se la conoce cariñosamente.
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Rozy es oriunda de una pequeña isla caribeña en las Indias Occidentales llamada Dominica. Su hermoso país de origen tiene una gran cantidad de montañas impresionantes y bosques frondosos, pero también alberga una serie de problemas públicos y sociales que generalmente se exacerban en los países pequeños y subdesarrollados.
Durante 15 años, Rozy trabajó como funcionaria en el gobierno de Dominica. Ella dice que Dios siempre ha puesto en su corazón estar activa para ayudar a quienes la rodean. Cuando su familia, un esposo y un hijo de dos años, decidió mudarse a Estados Unidos en busca de oportunidades más lucrativas, ella pensó que perdería su utilidad para aquellos a quienes llamaba comunidad.
Pronto descubriría que Estados Unidos, un país con acceso a tantos recursos, tampoco tiene suficientes para que todos prosperen. Descubriría que hay personas aquí en este gran país que también necesitan ayuda.
Tomó tiempo, pero Rozy se abrió a la nueva comunidad que la rodeaba. Comenzó un ministerio en la calle llamado Reach Out and Touch, que suministraba agua y refrigerios a quienes sufrían el sofocante verano de Houston.
“En ese lapso de tiempo vi gente de la carretera que venía y compartía sus problemas. Orábamos por ellos y fue muy hermoso escuchar testimonios. La gente pasó de vivir en la calle y tener sólo una camisa o dos a vivir en su propio departamento. Fue algo grandioso que me encantó hacer”.
Después de finalmente establecerse en su vida en Houston, Rozy fue llamada a Chicago a fines de 2014. Su hijo se mudó al West Side y él le contó cómo ella puede ser una bendición para las muchas familias afectadas por la pobreza y la violencia. Un día, una mujer en una iglesia que frecuentaba Rozy le entregó un folleto sobre una oportunidad de voluntariado. El volante promocionaba la gran inauguración del Breakthrough FamilyPlex en el cercano East Garfield Park.
ENCONTRAR HOGAR Y CURACIÓN
Antes de que la mujer pudiera terminar su pedido, Rozy supo que esa era la oportunidad que estaba buscando. Ese fue el momento en que Rozy dice que tuvo una revelación.
“Fui ese día y me ofrecí como voluntaria”, dijo. “Y déjame decirte que desde ese día supe que ese era mi gran avance. Traje una taza y mantuve el programa Breakthrough en mi estante para recordarme que era el día que Dios me dio mi gran avance para mi propósito en Chicago”.
Después de su primer día de servicio, Rozy se arraigó cada vez más en la comunidad Breakthrough. Rozy comenzó a trabajar como voluntaria regularmente en el Centro para Hombres en la cocina con un amigo. Después de un tiempo, esa amiga dejó de venir, pero Rozy permaneció a pesar del deterioro de su salud.
Cuando su cuerpo se lo permitía, Rozy pasaba el mayor tiempo posible promocionando Breakthrough. A veces, venía como voluntaria tres o cuatro veces por semana y aceptaba turnos abandonados por otros. A medida que sanaba, aumentó su tiempo como voluntaria, porque para eso, dijo, fue traída aquí.
No pasó mucho tiempo antes de que el personal se encariñara con la Sra. Rozy. La coordinadora de Breakthrough Food Service, Sherry Lin, dijo que Rozy tenía una unción especial sobre ella.
“Creo que ella acaba de demostrar un corazón de sirviente. Y, sinceramente, desde el principio, eso es lo que ella ejemplificó”.ella dijo. "Según me dijo, parece un viaje personal para ella, ya que busca bienestar físico, mental y emocional, el hecho de que también acompañará a algunos de los invitados a Breakthrough".
Aunque era nueva en Breakthrough, Rozy se sintió como en casa abriendo su corazón a los demás para que pudieran sanar juntos. Cuando la coordinadora de la Red de Apoyo para Adultos, Teresa McHenry, conoció a Rozy por primera vez, dijo que necesitaba un extraño con quien hablar.
“Cuando Rozy llegó aquí por primera vez, ella estaba trabajando en la cocina y yo tenía algunos problemas. Quería hablar con alguien que no me conocía”, dijo McHenry. “Rozy y yo hablamos, oramos, reímos… y luego hablamos, oramos y reímos. Así fue como la conocí”.
SERVIR EN COMUNIDAD
Rozy, a quien el personal se refiere como la persona más humilde que conocen, se negó a permanecer estática en su papel en Breakthrough. Cuando las donaciones de ropa comenzaron a acumularse en el Centro para Hombres, McHenry y su personal vieron a Rozy como la persona perfecta para manejar la situación y ella aceptó.
"Lo importante es hacer que [el armario de ropa] se sienta como un lugar donde pueden entrar y decir 'guau'", dijo. “El hecho de que vengas de una mala situación no significa que merezcas zapatos apestosos o una camisa sucia y caliente... Quién sabe dónde estaremos, dice Dios para ayudar a los oprimidos y levantar a los pobres. La idea es hacer lo que Jesús hizo cuando estuvo aquí."
La habilidad culinaria de Rozy atrajo a más personas hacia ella. Mientras algunas personas disfrutaban de las conversaciones haciendo fila para algunos de sus famosos platos de pollo al curry, otros miraban por encima de su hombro para saber qué especias y hierbas usaba para hacer que el pollo fuera tan jugoso.
Para Rozy, Breakthrough no fue solo una salida para ayudar a los demás, sino una forma de crecer y sanar con la comunidad que ha llegado a amar.
“Este es sólo el trampolín de lo que hice”, dijo Rozy. “Esto es lo que Dios me estaba entrenando para hacer en Houston con un propósito… Este es mi lugar, aquí es donde Dios me quiere. Me entusiasma trabajar aquí y amo al personal y el personal me ha bendecido”.
Breakthrough proporciona un espacio seguro para que los jóvenes crezcan, enfrenten sus miedos y aprendan a ayudar a los demás. CBS Chicago destacó nuestro programa de deportes para niñas y las otras formas en que nos asociamos con las familias en Garfield Park.
